02/05/2013
El presidente de Bolivia, Evo Morales, logró esta semana el apoyo que necesitaba para presentarse a las elecciones el año que viene. El Tribunal Constitucional (TC) falló el lunes a favor de que tanto él como el vicepresidente Álvaro García Linera puedan aspirar a un tercer mandato consecutivo. El Senado había planteado una cuestión de constitucionalidad porque Morales y García Linera fueron elegidos para sus respectivos cargos en diciembre de 2005 y reelegidos cuatro años después, por lo que de aspirar a los comicios de 2014 sería su segunda reelección, cuando la Constitución sólo permite una.El TC ha concluido que pueden aspirar a esta reelección, porque se trataría en realidad de la primera tras la entrada en vigor de la Carta Magna el 7 de febrero de 2009. La oposición criticó el fallo pero anunció su disposición de enfrentarse al gobernante en las urnas. Samuel Doria Medina, líder de Unidad Nacional (centroderecha), denunció que el TC «se pone al margen de las leyes permitiendo una re-reelección» y recordó a Morales que en 2008 anunció que no postularía a un nuevo mandato.
El presidente pasó por alto este importante triunfo en su discurso del Primero de Mayo, en el que sorpendió a los bolivianos al dar a conocer el decreto firmado para subirse el sueldo un 20%, hasta los 1.960 euros, según dijo «presionado» para permitir así un aumento de los sueldos a los funcionarios. También anunció la expulsión de Bolivia de la agencia estadounidense para el desarrollo internacional (Usaid), acusándola de «conspiración e injerencia en asuntos políticos internos».